martes, 4 de diciembre de 2018

5. Los secretos y enigmas de la Universidad de Salamanca


5. LOS SECRETOS Y ENIGMAS DE
LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA




1.      Motivación

La presente reflexión la hago cuando se conmemora el octavo Centenario de la creación de la Universidad de Salamanca a la que estuve vinculado realizando estudios de idiomas en mis años mozos. Cuando me tuve que trasladar a Madrid para estudiar Arquitectura quise hacer el doctorado con un proyecto de conservación del carácter histórico artístico de la Ciudad de Salamanca. Fue entonces cuando sentí la necesidad de volver a mis orígenes para indagar en el valor artístico de la ciudad como un legado que había que conservar y divulgar.

La presente reflexión quiere indagar los enigmas ocultos en la fachada de la Universidad. Muchos han sido los estudiosos que han intentado descifrar y traducir el valor y simbolismo de las figuras esculpidas en la fachada de la Universidad entre los más destacados: Camón Aznar, Diego Angulo, Iñiguez, Sánchez Reyes, Santiago Sebastián, Luis Cortés, Paulette Gabaudan, Enrique Sánchez Reyes, Esteban Lorente, F. Pereda, C. Flórez. Nosotros sobre todo vamos a centrarnos en los estudios realizados por P. Gaubadan, L. Cortés y Enrique Sánchez Reyes.

Aunque no cabe negar la creatividad de los maestros artistas y canteros de la época no se debe olvidar que estos también obedecían a todo un programa iconográfico. El arte y la arquitectura era una verdadera transmisión del pensamiento de la época. Desde una visión romántica del arte se concibe al artista guiado por su propia musa, inspiración y genialidad. La verdad es que estaban al servicio de un programa, un mensaje una ideología y espiritualidad. Respondía a toda una cosmovisión que es preciso investigar. El catedrático de la Universidad Luis Cortés, Paulette Gabaudan y Enrique Sanchez Reyes han contribuido en gran manera a esta investigación a través de claves interpretativas[1].

Tanto los poetas, literatos, los artistas y los santos bebían de una fuente que es preciso destacar. La suma teológica de Santo Tomás o la Divina Comedia de Dante responde a toda una configuración y cosmovisión que se descubre en las obras artísticas de las grandes catedrales. Diríamos que hay una extraña confrontación del arte con la literatura y la teología. Toda obra artística responde a un programa creador y trata de transmitir un mensaje. La iconografía trata de indagar en el sentido simbólico por el cual una obra expresa una sensibilidad y cosmovisión colectiva.

Es una pena que los que se acerquen a contemplar la fachada de la Universidad a menudo solo se paren a ver la rana sobre la calavera. Según la tradición, se dice que su hallazgo en la fachada augura éxito en los estudios. El mismo Unamuno llegó a decir que no es lo malo que la miren las gentes sino que solo la miren a ella, olvidando los esplendores y bellezas de tan prodigiosa fachada. Esta reflexión trata de sacar a la luz esta identidad perdida a lo largo de los siglos y de esclarecer mejor el misterio que la obra de arte encierra. Somos consciente que es una humilde aproximación pero que pude arrojar luz para posteriores investigaciones. Como peregrinos en búsqueda del saber, siguiendo las huellas de los que nos han precedido nos adentramos en el misterio provocador, enigmático, conmovedor de la iconografía y del mundo de las enigmáticas figuras de la Fachada de la Universidad de Salamanca.


                                   


2.      Un poco de historia

La Universidad de Salamanca es uno de los cuatro primeros pilares universitarios del mundo occidental: Paris, Bolonia y Oxford. El origen todavía permanece un poco obscura[2]. La Universidad fue fundada por Alfonso IX en 1218. En 1254 Alfonso X el Sabio otorga a sus títulos su validez con un reglamento real. El Papa Benedicto XIII reconoce sus títulos con validez universal por la bula ius ubiqui docendi. El Papa Luna protector de esta Casa le da unas constituciones que serán renovadas por Martín V en 1422. En 1474 se construye la primera biblioteca.

Los antecedentes. La institución de la Universidad desde su primitivo comienzo asociada a la Catedral hasta adquirir autonomía propia con edificios propios tardó doscientos años. Sus orígenes como escuela capitular están relacionados con las escuelas de Palencia y la Compostelana influenciada por la Universidad de Bolonia y su afición al derecho. La escuela capitular salmantina se remonta a los primeros momentos de la repoblación en el S. XII. Los obispos trabajan por su florecimiento y lentamente se va amoldando a las normas académicas del extranjero siguiendo el modelo boloñés[3].

Los primeros estudios que hubo en Salamanca tuvieron origen en esta escuela catedralicia. El fundador de la Universidad fue el rey de León, Alfonso IX, por emulación del rey de Castilla, Alfonso VIII transformando la escuela catedralicia en estudio general. Así lo testifica el hijo de Alfonso IX, Fernando III el Santo quien la confirma todos los privilegios dados por su padre[4]. Nombra un tribunal mixto para resolver los litigios constituido por el obispo, el deán, el prior de los dominicos y el guardián de los descalzos[5]. La fundación de la Universidad da a la ciudad un tremendo auge. Salamanca hasta entonces cerrada y medieval se vuelve abierta y ecuménica. Acoge a multitud de estudiantes de distintos lugares hasta conocerse con el sobrenombre de la Atenas española.




3.      La primera sede en la Catedral

Mientras el Estudio dependía de la sede catedralicia las clases se impartían en diversas dependencias del Cabildo catedralicio. Las primeras dependencias utilizadas para el Estudio fueron la capilla de Santa Bárbara y de Santa Catalina dentro de la Catedral y la parroquia de San Benito y otras instalaciones docentes propiedad del Cabildo. Los exámenes de grado, así como la elección del rector se realizaban en la Capilla de Santa Bárbara del claustro de la catedral Vieja. La capilla de Santa Bárbara fue fundada en 1334 por el obispo Juan Lucero con el objetivo de convertirla en su última morada. Es por eso que en el centro de la capilla está su sepulcro con su estatua yacente policromada. En dicha capilla no sólo se darían clases al inicio, sino que en 1483 se constituyó en el órgano para otorgar los grados académicos. El ritual de la función comenzaba la víspera del examen cuando e introducía al graduando para ser examinado al día siguiente. El propio mobiliario de la capilla ayuda a entender mejor el desarrollo del acto[6]. Alrededor del sepulcro del obispo Lucero existe una barandilla que en la parte superior llevaba unas puertas que cerradas servían de mesa. En la cabecera existe un sillón frailero donde se sentaba el estudiante. Los profesores se situaban en los escaños adosados en las paredes. En este ambiente tenía lugar el examen cuya superación conllevaba la celebración de fiestas y toros y la salida triunfal del nuevo licenciado o doctor. El fracaso obligaba a salir por la puerta de los carros, una puerta secundaria de la catedral para evitar los reproches del pueblo que se quedaba sin fiestas[7]. La vinculación de la Universidad y la Catedral fue muy grande durante el Medievo. Algunos canónigos fueron catedráticos. En particular, el catedrático de música solía ser el maestro de capilla.

Como resumen diremos que conviene distinguir los inicios con Alfonso IX fueron unos principios de enseñanza individuales y dispersos por la vida. Lo que fundó Alfonso IX fue una serie de escuelas dispersas que más tarde, con Alfonso X el Sabio, se unificarían en una sola Escuela o Estudio donde concurren maestros y escolares para aprender los saberes. El primero fundó las escuelas, el segundo las consolidó, reglamentó y amplió[8].



4.      La primera biblioteca

El origen de la primera biblioteca universitaria se confunde con los orígenes del Estudio. Conviene destacar que fue la primera biblioteca en España a encargo de Alfonso X el Sabio en 1254[9]. El rey Fernando el Católico, preocupado por la enseñanza y por la cultura, sería un gran benefactor e impulsor de la Universidad. La Universidad sería el órgano difusor de la cultura y su biblioteca el arma difusora. Buscó profesores dentro y fuera de España, concedió grandes privilegios a los estudiantes, amplió las libertades de los concejos, ordenó la traducción del Fuero Juzgo en castellano y abrió una era de esplendor artístico para España. Bajo su protección después de la Reconquista, al abrigo de la paz y con la ayuda del botín de tantas conquistas, España se cubrió de gloria[10].

Como resumen de la evolución que se dio en la formación de la Universidad diremos que se pasó de las escuelas al Estudio, del Estudio a la Universidad y la Enciclopedia. Es éste término el que aparece en el medallón que a los Reyes Católicos dedicó la Universidad. Las denominadas escuelas pasarían a serlos Colegios Mayores. El colegio Mayor de Anaya sería el primer colegio Mayor de España. En el S. XVI Salamanca contaba ya con cuatro colegios Mayores y más de una veintena de colegios menores. Cada uno de los colegios tenía sus hábitos y becas particulares. Además, todas las órdenes religiosas se verán obligadas a tener casas de formación o estudio lo que conllevó un verdadero florecimiento.

La Universidad y en ella la Biblioteca supuso un verdadero horno de cultura y saber. Los copistas reproducían manuscritos al dictado para que se leyesen luego en la Biblioteca. Los copistas copiaban los manuscritos en lo que se ha tenido por biblioteca primitiva y luego eran trasladados al gran salón del primer piso donde se materializó definitivamente la Biblioteca. Las dos cátedras que allí existían se unieron en un gran salón que terminó siendo la gran biblioteca de la Universidad. La galería que da acceso guarda los siete enigmas del saber mientras que en las barandas de la mínima escalera se esconde el último de los enigmas donde se recomienda a los estudiantes que piensen bien si intentan casarse cómo ha de ser su mujer.




5.      Los autores de la fachada de la Universidad

La evolución de la Universidad supuso diversas transformaciones. Al edificio primitivo se le adosa la nueva fachada en el tiempo que se hacen nuevas modificaciones como el patio de Escuelas para mejor contemplación de la nueva fachada[11]. El proyecto que fue modesto en su origen empezó cuando se decidió edificar en el ala oeste del primitivo edificio un piso alto para albergar la nueva biblioteca. Para esto fue necesario construir un cuerpo saliente para servir de contrafuerte y se acordó que llevaría de adorno un escudo de armas. El modesto proyecto se transformó en el espléndido retablo de piedra que vemos hoy.

El tiempo cuando acontece esta transformación es el siglo de Oro, de esplendor del Renacimiento con el reinado de Carlos V su promotor[12]. Al construir la fachada estamos en plena época imperial. Las ansias de saber que comienzan en el reinado de los Reyes católicos se van convirtiendo en desatada ambición de ciencia. La Universidad está en todo su auge y esplendor. Junto al emblema de La Alma Mater figuran las nuevas armas que se habían dado al Estudio, un Magister que desde su alta cátedra discursea con el brazo extendido a un grupo de discípulos que le rodean, escuchan atentamente y escriben sus anotaciones. Una inscripción circunda estas figuras y reza: Omnium sccientiarum prínceps salmantica docet[13].

Se desconoce la fecha y autores de la fachada de la Universidad. No se sabe con precisión cuando se comenzó. Se piensa alrededor de 1513 y se finaliza en 1528. La fachada se adosaría al viejo edificio gótico en el primer cuarto del S. XVI. No se sabe con precisión su autor, programador, arquitecto ni los escultores. Respecto al autor ideológico se piensa que Hernán Pérez de Oliva fuera el inspirador del claustro Esta hipótesis no se relaciona dado que cuando este ilustre cordobés llega a Salamanca en 1521 el claustro ya estaba realizado y gana una cátedra en 1524. En cuanto a la portada pudo haber alguna sugerencia ya que murió en 1531, pero se inclina por la dirección del claustro universitario ya que hizo sentir su peso en la cuestión de las lápidas para las aulas, preparadas por el citado humanista.

Se piensa que uno de sus impulsores fuera Pérez de Oliva, catedrático de la Casa y hombre de saberes varios incluida la arquitectura. Otro fray Antonio de Guevara, obispo muy próximo al emperador y cronista suyo. Pensadores pertenecientes al círculo de Nebrija. Entre los maestros escultores se piensa en Egidio o Gil, Juan de Toya o Troyes, discípulos de Alonso Berruguete o su ampliación interior por Rodrigo Gil de Hontañón.



6.      Su organización.

Las autoridades académicas y órganos de gobierno venían formados por el rector, que era un estudiante generalmente noble y era elegido anualmente. El maestrescuela era cargo vitalicio y muy poderoso como representante del pontífice. El órgano directivo estaba compuesto por el primicerio, presidente del claustro de catedráticos, un claustro de diputados y un claustro general. El cargo de maestrescuela ya aparece al ser elegido obispo don Berengario. Era el encargado de la enseñanza y llegó a presidir a todos los maestros. Hay que esperar hasta Alfonso X el Sabio en 1254 para que se efectúe la primera organización del Estudio y hasta el 1411 para que la universidad tenga las primeras Constituciones aprobadas por el papa Benedicto XIII. Esta fue inspirada en el modelo boloñés. Esto deja ver la intervención bipolar tanto de la monarquía como del papado. Poco a poco irá retrocediendo la intervención del papado y se reafirma la autoridad monárquica. El modelo teocrático pasa a un modelo monárquico y más posteriormente democrático.

El cargo de rector, cabeza de la Universidad,  al inicio lo ejercía un estudiante en un periodo de tiempo limitado a un año[14]. Su gobierno no era absoluto sino democrático y supeditado y asesorado por sus organismos consejeros: el claustro pleno, el claustro de consiliarios y el claustro de diputados. La constitución mandaba que el rector fuera un año de Castilla y otro de León y que no fuera vecino de Salamanca. El escrutinio para la elección del rector debía comenzar seis días antes del día de San Martín. Una vez elegido debía de prestar juramento de fidelidad y obediencia al Papa.

El maetrescuela ocupaba después del rector el segundo lugar. Era puesto por los estudiantes y elegido por los diputados. Era constituido en padre y maestro de los mismos y ejercía el papel de jurisdicción. Es el juez ordinario del estudio, el que ejecuta y hace cumplir las constituciones. Llamado también Canciller es el representante simbólico del poder pontificio de la Universidad y dependía directamente de la Santa Sede. Es por eso que una vez elegido debía de ser confirmado por el obispo de la Sede.

Los consiliarios eran estudiantes mayores de 25 años elegidos entre los clérigos, no casados y de diferentes diócesis. No podían ser vecinos de Salamanca, ni tampoco catedráticos asalariados. Eran elegidos al igual que el rector el día de San Martín, aunque seis días antes comenzaba el escrutinio. En riguroso secreto. El rector, con los consiliarios, formaban el claustro de consiliarios que tenía como cometido las atribuciones docentes y de provisión de cátedras.

Los diputados eran veinte e los cuales diez debían ser catedráticos y las otras diez personas de dignidad o nobleza, siempre con un mínimo de 25 años. Estos, aparte de la elección del maestrescuela, se ocupaban de los negocios de la Universidad. Su claustro se denominaba de diputados. Para reunirse tenía que citarles el bedel por orden del rector.  Se debían reunir al menos dos veces al mes.

Los catedráticos obtenían su cátedra bajo oposición. Una vez obtenida la cátedra, esta era vitalicia. Debían de atender a sus obligaciones. Hacían juramento el primero de mayo de que leerían sus lecciones que le eran asignadas por el rector. La ausencia de sus lecciones sin causa justificada le privaría de la cátedra.





Los estudios y las lectios

Elocuencia, derecho canónico, medicina, astronomía, derecho civil o de gentes, lenguas (hebreo, caldeo, árabe, latín y griego). Así se reflejan en las aulas alrededor del claustro. La primera aula que se encuentra comenzando por la izquierda es la de la Elocuencia hoy denominada de Dorado Montero como homenaje al que fuera catedrático de derecho penal. El derecho canónico se enseñó en varias aulas, entre ellas la de Unamuno hoy restaurada que conserva una cabeza del célebre rector. Después encontramos el aula de Francisco Vitoria que fue General de Medicina. Después el aula de Alfonso X el Sabio donde se enseñó el Derecho Civil. 

El aula mejor conservada es la de Fray Luis de León que conserva el mobiliario antiguo con los bancos, las mesas y la silla de la cátedra. La cátedra está elevada sobre una pequeña plataforma y cubierta con un tornavoz. Sobre el suelo está el asiento para el repetidor, que participaba de las discusiones académicas. Se conserva en la cabecera el estrado abalaustrado para los doctores, sobre elevado con respecto al suelo. Junto a la antigua capilla esta la antigua aula de lenguas. En el lado contrario al aula de la elocuencia se encuentra el aula de Música o de Salinas. Se llama así en honor al célebre profesor de esta Casa. El aula que hoy es el Paraninfo tuvo como uso primitivo el aula General de derecho Canónico. Esto explica que sea el aula de mayor aforo pues esos estudios fueron históricamente los más demandados por los estudiantes. Sobre su puerta adintelada todavía se distingue la inscripción: Iuri Canonico bajo las armas del Papa Luna[15]. El S XIX fue una época de gran declive. En 1857 la Ley Moyano otorgó preponderancia a la Universidad de Madrid y los estudios se redujeron a las cátedras de Derecho, Teología y Filosofía y Letras. En 1970 volverá a recuperar su prestigio y autonomía con el impuso de su rector Miguel de Unamuno.





7.      La Escuela de Salamanca

En el siglo de Oro, el S. XVI, la universidad adquiere su máximo apogeo con el impulso que le da la Orden de los Predicadores y la Escuela de Salamanca. Francisco de Vitoria, Melchor Cano, Domingo de Soto van a ser maestros célebres junto con el célebre agustino Fray Luis de León. Francisco Vitoria es el fundador de la Escuela de Salamanca de aquí que también se conozca como Escuela de Vitoria[16]. Esta Escuela se constituye en la Escuela Española de derecho natural o de derecho de gentes[17]. La Escuela de Salamanca ha tenido una enorme trascendencia histórica contribuyendo a la divulgación de la Universidad de Salamanca a toda la humanidad. Su impactó marcó una nueva generación que se formó en la Universidad y luego en los colegios y seminarios incluyendo los de la Compañía de Jesús.

Son muchas las lecciones, relectios, del célebre humanista: De Indis, De iure belli,  que contribuyó a promulgarlas Nuevas Leyes de las Indias defendiendo el derecho de los indios y condenando la esclavitud. Su cátedra de teología llego a ser considerada como la más importante de la cristiandad. Francisco Vitoria desde la cátedra de Teología en la Universidad denunció y proclamó la carta de derechos de los indios. Su magisterio hizo escuela. Vitoria aparece como el más notable internacionalista del Renacimiento y se coloca entre los mayores humanistas de todos los tiempos[18]

La Escuela de Salamanca se caracteriza por su método, por su fundamentación y por su contenido. Se funda en la naturaleza humana imagen de la divina y promueve la ley de la solidaridad y comunicación natural. Promueve sobre todo el derecho de gentes creado por libre voluntad de todos los pueblos. Maestros y profesores discípulos de Francisco Vitoria empezaron a explicar la Suma Teológica de Santo Tomás y por hacer repeticiones o relecciones de acuerdo con la Escuela de Salamanca.



8.      Figuras celebres de la universidad

Además de los ya dichos Fray Vitoria, Melchor Cano, Domingo de Soto, Fray Luis de León, Francisco Vitoria, son muchas las figuras asociadas a ella: Santo Toribio de Mogrobejo, Bartolomé de las Casas, Fray Bernardino de Sahagún, Antonio de Nebrija, Fernando de Rojas, Luis de Góngora, Abraham Zacut, el Conde Duque de Olivares, Calderón de la Barca,  Hernán Cortés, Manuel Belgrano, Meléndez Valdés, Cadalso, Jovellanos, Fray Diego Tadeo González, Juan Pablo Forner, Iglesias de la Casa, Dorado Montero, Salinas,  M. de Esperabé, M. de Unamuno, Ramiro de Maeztu, José María Gil Robles, Tierno Galván, Adolfo Suarez o Juan Manuel de Prada. Por la universidad pasaron santos de la talla de San Juan de la Cruz. La ensalza Miguel de Cervantes. La primera alumna mujer fue Beatriz Galindo, conocida como La Latina, y la primera profesora Luisa de Medrano.

En la Universidad fue pionera en los estudios del derecho eclesiástico y derecho civil o derecho de gentes promovido por los maestros humanistas. Se defendió con bravura los derechos de los indios por Fray Vitoria y Bartolomé de las Casas. La Universidad de Salamanca se convirtió en modelo para las que se fundaron en Hispanoamérica y Filipinas (la primera en todo Oriente, la de Santo Tomás en Manila). En ella en tiempos de Nebrija se publicó la primera Gramática Castellana, en ella se estudió la reforma gregoriana y el nuevo calendario gregoriano, de ella surgieron los grandes teólogos de la reforma del Concilio de Trento.




9.      El Siglo de Oro, época de esplendor

El S XVI está caracterizado por toda una revolución espiritual y cultural que desemboca en una revolución educativa y un cambio de mentalidad. Salamanca se realza con toda una serie de colegios mayores y menores, órdenes religiosas y militares que enriquecen su patrimonio humanístico. La universidad viene a ser el corazón de la ciudad. La universidad se convierte en faro luminoso y Alma Mater de la cultura hispánica y de la Hispanidad[19]. En ella los estudiantes aprenden no solo las letras sino también la virtud y buenas costumbres[20]. El S XVI es un tiempo de paz después de las revueltas de las Comunidades y las Germanías. 

El humanismo propiciado por la Escuela de Salamanca tiene una múltiple dimensión. Se trata de un humanismo integral del saber humano y el saber divino, combinando la ciencia sacra (teología) y las ciencias humanas[21]. El pensamiento humanista no renuncia a ninguna de las fuentes esenciales de la cultura, los cásicos, la Biblia, recogiendo la tradición tanto filosófica como teológica espiritual[22]. Con los Reyes Católicos y los nuevos descubrimientos se da una expansión cultural jamás conocida hasta entonces. Con un talante universalista se da una estrecha convivencia de las tres grandes civilizaciones del mundo conocido: Europa, América y Oriente. Con un talante ecuménico interreligioso conviven los cristianos, judíos y musulmanes[23]

Se desarrolla la imprenta con fuerte divulgación del saber. La revolución espiritual y la Contrarreforma suscita también un vivo interés por la lectura de la Biblia y de las obras de los reformadores. La Escuela de Salamanca introduce nuevos planteamientos elaborando una nueva propedeútica  y metodología del saber mucho más integradora[24]. Se trata de un humanismo integral que inquiere innovaciones metodológicamente nuevas desprendiéndose de la “auctóritas” y que toma por guía la búsqueda renovadora de la verdad.




10.  El humanismo síntesis del saber clásico y renacentista

El lenguaje esotérico y mistérico: El Renacimiento recoge del románico y gótico el gusto por el desvelamiento del misterio en su carácter. Los canteros tenían sus marcas, los artistas sus escuelas, los maestros sus secretos. Lo secreto, lo críptico se expresa por medio de emblemas, enigmas o jeroglíficos. Se utiliza el lenguaje del símbolo para evocar una realidad más profunda y misteriosa. Todo lenguaje cifrado supone una clave es decir una interpretación reservada a unos pocos iniciados, los maestros[25]. Poco a poco lo que había estado en secreto para unos pocos entendidos se fue divulgando y sacando a la luz. Se fueron libros que ofrecían claves para descifrar el lenguaje críptico y para desentrañar la rica y sabia hermenéutica de los símbolos. Así se comprende el éxito alcanzado por la recopilación del griego antiguo Horapolo que lleva el título de Hieroglyphica. Este y otros libros se ponen de moda para esclarecer el lenguaje simbólico y emblemático.



El uso de las imágenes míticas: la mitología, tan familiar a los hombres del Renacimiento, fue un recurso de todas las épocas para tratar de responder a las cuestiones más fundamentales. Los personajes responden no responden a una realidad histórica sino a través de la leyenda que los convirtió en seres ejemplares. En el género literario algo similar acontece con el lenguaje poético, simbólico o parabólico. En el Renacimiento con la fascinación ejercida por volver a los orígenes de la Antigüedad clásica no es de extrañar que se haga uso de los grandes héroes del pasado. Los que la fama y la gloria ha hecho entrar en la leyenda se convierten en modelos de virtudes.

De aquí el resurgir de los héroes de la mitología griega: Júpiter, Minerva, Cupido, Hércules, Príapo, Venus, Medea, Sibila, Marte, Cleóbulo, Sardanápolo, Heliogábalo, Juno, Fedra, Heráclides, Júpiter, Teseo, Pitaco. Hércules representa el bien, el valor, la virtud, la sabiduría, la bondad y la fortaleza que lucha contra los apetitos desordenados y los vence. Representa el amor limpio, puro, sagrado, simbolizado en la pareja humana antes del pecado original. Venus es la diosa que no supo guardar la castidad corrompida por las pasiones. Venus se rodea de su padre Baco, dios del vino y de Príapo el hijo de Baco y Venus que incitaba a los hombres al placer. El estudiante debe escoger entre Hércules o Venus.

El Renacimiento saca también a la luz los héroes legendarios del esplendor del Imperio como Escipión el Africano, Trajano, Marco Antonio, Julio Cesar, Augusto, Aníbal, Alejandro Magno, o las figuras de Hispan, Atas, Liberia como origen de nuestra identidad. Desde este prisma cabe destacar también el uso de la monarquía como resurgir del mito imperial. Así la relevancia de la figura clave de los Reyes católicos, Fernando e Isabel, y de otras relevantes con la monarquía como Carlos V, Isabel de Portugal, Juana la Loca. Toda la fachada tiene una exaltación heráldica de la monarquía. El medallón central del primer piso corresponde a las efigies de los Reyes Católicos, protectores de la Universidad como se desprende de la inscripción en griego que circunda el medallón: los Reyes para la universidad y ésta para los reyes. En el segundo piso aparece un gran escudo central de Carlos I rodeado por el collar de la Orden del Tesón de Oro. El escudo está flanqueado con el águila de San Juan y el águila bicéfala del imperio.

Otro aspecto a destacar sería la relevancia del Papado. En la Fachada aparecerá el Papa Benedicto XIII su protector, El Papa Martín V su impulsor. En el último piso aparece con más relieve la exaltación del Papado. Destaca en el centro la figura del Papa benefactor de la Universidad. Si uno se detiene el Renacimiento supone un cambio de paradigma. Durante el Medievo la sociedad era teócrática teniendo a Dios como centro. Esta concepción de la sociedad teocrática se refleja en la inscripción: Ofrece al Señor con liberalidad los dones de la naturaleza que te da tu trabajo y así poco a poco irás conformando tu voluntad con la de Dios. El custodiará con firmeza tu vida, gobernándola misericordioso y te conservará incólume en los peligros.

El humanismo de Renacimiento pone al hombre como centro y se produce el paso de la concepción teocrática a la monárquica y más tarde democrática. En la fachada aún se mantiene el orden de jerarquía pues el papado aparece el tercer cuerpo superior. Así en el cuerpo alto central aparece el Papa rodeado de sus cardenales. El Papa era figura clave en la institución del sacro Imperio. Aunque tratan de convivir las dos concepciones existe pues la pugna entre el papado y la monarquía. Poco a poco irá perdiendo relieve la primera para dar paso a la segunda.





Trattato de Filarete

Filarete viene (del griego Amigo de la Virtud, y es conocido como Antonio di Pietro Averlino (1400 - 1469). Era escultor ingenieroarquitecto y teórico de la arquitectura del Renacimiento. Fue famoso por su Trattato d'architettura,Tratado de arquitectura, en 25 volúmenes, ratifican su importancia dentro de los arquitectos del RenacimientoDicho Trattato d'architettura lo acabó en torno a 1465; tuvo una amplia divulgación en manuscrito. Un manuscrito profusamente ilustrado del Trattato, el Codex Magliabechiano, de hacia 1465, dedicado a Pedro de Médicis y conservado en Florencia, sugiere que Filarete había perdido el favor en Milán poco después de completar este libro.

El estilo que Filarete llamaba el «bárbaro estilo moderno», que instaba a los lectores a que abandonasen, es el estilo gótico del Norte de Italia. Gran parte de su Trattato, es un relato detallado de una ciudad imaginaria y en cierto modo mágica, Sforzinda, bautizada así en honor del mecenas de Filarete. La ciudad, que él comparaba con un cuerpo humano ideal, se inscribía dentro de una estrella de ocho puntas de muros inscritos dentro de un perfecto foso circular, el primero de muchos planos de ciudades ideales con forma de estrella que reaccionaron contra los espacios populosos e irracionales de la ciudad medieval. Ocho torres se colocan como bastiones en los puntos salientes de la estrella, y ocho puertas eran la salida de avenidas radiales, cada una de las cuales pasaba por una plaza de mercado, dedicadas a distintos géneros. Otras calles radiales tenían las iglesias parroquiales y los conventos. Su decorado altamente simbólico se describían detalladamente, junto con los cálculos astrológicos requeridos para la armonía, otras materias perfectamente prácticas como fortificaciones, al lado del descubrimiento de un Libro Dorado que detallaba los edificios de la Antigüedad.

Los aspectos de romance cortesano tardo-gótico de este tratado sobre la arquitectura no fueron del gusto del, más racional, siglo XVI: Giorgio Vasari despreció el tratado de Filarete como «el más ridículo y quizás el más estúpido libro que se haya escrito nunca». Sin embargo, su eco es tal que no ha podido desligarse de la Utopía de Moro. La primera publicación del Trattato de Filarete tuvo que esperar a que el manuscrito del Codex Magliabechianofuese editado por W. von Ottigen, en 1894. En un documental del National Geographic aparece relacionado con la autoría del enigmático Manuscrito Voynich.





El sueño de Polifilo, Hypnerotomachia Poliphili 

Se trata de una obra de finales del S. XV escrita por el dominico Francisco de Colona. Fue publicada en Venecia en 1499. La obra es una novela simbólico mística rica en hermosas imágenes. La obra tiene una finalidad didáctica y moralizante. La obra presenta una misteriosa alegoría en la que Poliphilo persigue el amor de Polia a través de un paisaje de ensueño, y es al parecer, al final reconciliado con ella por la Fuente de Venus. El tema se encuentra dentro de la tradición del género del romance dentro de las convenciones del amor cortesano, que todavía proporcionaba temas atractivos para los aristócratas del Quattrocento[26]. Su obra tiene especial interés porque se transformó en un repertorio de dibujos de temas latinos ligados a la arqueología a la vez que de emblemas y enigmas que constituyó la fuente gráfica de muchos artistas
La obra contiene preciosas y elaboradas imágenes y descripciones de escenas que implican al personaje principal del título, Poliphilo, "Amigo de Muchas Cosas", mientras vagaba por una especie de país de ensueño bucólico-clásico en busca de su amor Polia, "Muchas Cosas"[27].
En la obra se narran escenas de las aventuras de Poliphilo, en una forma a la vez cruda y adornada del estilo del arte que se integra perfectamente con la simbología del tiempo. Estas imágenes también son interesantes porque arrojan luz sobre lo que la gente en el Renacimiento imaginaba sobre las supuestas cualidades estéticas de las antigüedades griegas y romanas. Se trata de uno de los libros más curiosos y enigmáticos, oculta una rara hermosura y un apasionado anhelo de perfección, sabiduría y belleza absolutas, bajo el signo del Amor. Desde el S XVI se ha visto rodeado de un aura de esoterismo, y está, todavía hoy, envuelto en misterios[28].
El libro comienza con Poliphilo, que ha pasado una noche inquieta porque su amada, Polia, lo rechazó. Poliphilo en sueños es transportado a un bosque salvaje, donde se pierde, encuentra dragones, lobos y doncellas y una gran variedad de arquitectura fantástica, escapa y se duerme una vez más. Entonces despierta en un segundo sueño, soñado dentro del primero. En el sueño, algunas ninfas lo llevan a conocer a su reina, y allí se le pide que declare su amor por Polia, cosa que hace. Luego es dirigido por dos ninfas a tres puertas. Elige la tercera, y allí descubre a su amada. Ellos son llevados por algunas ninfas más a un templo para casarse. En el camino se encuentran cinco procesiones triunfales celebrando la unión de los amantes. Luego son llevados a la isla de Cythera por barco, con Cupido como contramaestre; allí ven otra procesión triunfal celebrando su unión. 
La narración se interrumpe, y una segunda voz toma el relevo, con Polia describiendo su erotomanía hacia Polifilo desde su propio punto de vista. Poliphilo reanuda su narración después de un quinto del libro. Polia rechaza a Poliphilo, pero Cupido se le aparece en una visión y la obliga a regresar y besar a Poliphilo, que ha caído en un desmayo mortal a sus pies, de vuelta a la vida. Venus bendice su amor, y los amantes se unen por fin. Como Poliphilo está a punto de tomar a Polia en sus brazos, Polia desaparece en el aire y Poliphilo se despierta.



La Divina Comedia
La Divina Comedia obra del escritor Dante Aligheri. Es la creación más importante de su autor y una de las obras fundamentales de la transición del pensamiento medieval (teocentrista) al renacentista (antropocentrista). Es considerada la obra maestra de la literatura italiana y una de las cumbres de la literatura universal. Se considera una de las obras maestras de la literatura italiana y universal. Dante resume en ella todo el amplio conocimiento acumulado durante siglos, desde los antiguos clásicos hasta el mundo medieval; su fe religiosa y sus convicciones morales y filosóficas. El estilo de la obra posee un rico lenguaje lleno de símbolos y frecuentes referencias a personajes históricos y de la antigua mitología.
Cada una de sus partes, o cánticas, InfiernoPurgatorio y Paraíso, está dividida en cantos, cada parte consta de treinta y tres cantos, más el canto introductorio suman 100 cantos en total. Cada canto fue compuesto por estrofas de tres versos endecasílabos o terza rima, que se dice él mismo inventó. El poema se ordena en función del simbolismo del número tres, que evoca la Trinidad , el equilibrio y la estabilidad, y el triángulo, las tres proposiciones que componen el silogismo, se sumaba al cuatro, que representaba los cuatro elementos: Tierra, aire, fuego y agua, dando como resultado el número siete, como siete son los pecados capitales. Finalmente, el Infierno está dividido en nueve círculos, el Purgatorio en siete y el Paraíso queda formado por nueve esferas que giran como los planetas en torno al sol. Toda la obra está llena de símbolos que remiten al conocimiento y al pensamiento medievales; religión, astronomía, filosofía, matemáticas, óptica, etc; encarnan en personajes, lugares y acciones.
El poema cuenta con tres personajes principales: Dante, que personifica a la humanidad, representa la tentación del pecado, Beatriz, que personifica la Fe y llevará a Dante a cada una de las esferas del paraíso, hasta el Empíreo, espacio inmóvil, donde contemplará la Rosa mística formada por Dios y sus elegidos. Y Virgilio, que hace otro tanto con la razón.
El paraíso representa el saber y la ciencia divina. El Infierno representa al ser humano frente a sus pecados y sus funestas consecuencias. El Purgatorio, la lenta purificación de sus culpas hasta la liberación. En esta obra el autor nos narra con extraordinario realismo un maravilloso viaje durante el que se encuentra con las almas de grandes y terribles personajes de la historia; es un canto a la humanidad que sólo en la fe en Dios encontrará su felicidad.



11.  Claves hermenéuticas:

Concepción de la universidad 

La Universidad de Salamanca enmarcada en un marco de universalidad, se concibe como la más importante de la monarquía hispánica, modelo de las universidades hispanoamericanas y una de las más importantes de la humanidad. La Universidad está concebida como el templo de la Sabiduría y toda la arquitectura es una escuela que nos introduce a ella. Para acudir a la biblioteca el estudiante accede por el zaguán, entra en el claustro y sube por la escalera a la primera galería[29]. El acceso lo configura el doble zaguán. Esto supone todo una iniciación o proceso porque sólo unos pocos privilegiados, los predestinados por Minerva, aquellos a los que los dioses dotaron de seso, pues según el dicho popular lo que no de natura, Salamanca no lo presta. En la primera bóveda aparecen las figuras de David tocando el arpa, Daniel y los leones, Isaías y Jeremías. La bóveda del segundo zaguán está presidida por el escudo universitario en la clave y tiene las figuras de los cuatro evangelistas sentados y con libro sobre pupitre. En la universidad se descubre el don más preciado que todo hombre puede poseer. El claustro, biblioteca, capilla y demás aulas y estancias de la Universidad responden a todo un programa iconográfico. Todo el interior se diseña respondiendo a un camino iniciático de cómo acceder a la verdadera sabiduría concibiendo la Universidad como templo de la sabiduría y la ciencia como iniciación y búsqueda del verdadero saber. La Universidad simboliza como quien puede vencer a los gigantes de la ignorancia.



La antigua escalera universitaria de acceso a la biblioteca. 

El programa iconográfico de esta antigua escalera como hemos dicho está en relación con los enigmas de la galería del claustro adyacente y responde al desvelamiento del último enigma, la bondad y el bienestar del matrimonio ordenado y trabajador y el malestar y desastre del otro matrimonio que al contrario es holgazán y jaranero. La escenificación arranca de uno y otro lado de la flor, flore pulchro nobiles apes, que está en medio de la baranda central y se va desarrollando hacia arriba y hacia abajo porque en lo alto está todo el bien y en lo bajo todo el mal. En dirección ascendente se observa la noble abeja que extrae dulce miel, representa la mujer noble y sumisa a su marido. Se despliega sus productivas labores en la industria (Mercurio cogido en una red), la labranza y el entrenamiento guerrero. En la última pilastra donde se representa el matrimonio noble se graba la leyenda nobilis vir y nobilis mullier. En dirección descendente se observa el frívolo gusano que saca un fuerte veneno de donde la abeja extrae dulce miel. Representa la mujer frívola que está conculcando el mal a su marido. Abajo en el barandal de entrada aparecen los bailoteos y diversiones a que se entrega este matrimonio frívolo y holgazán.




La nueva escalera de tres tiros por el patio de Escuelas.

La escalera fue realizada durante el primer cuarto del S XVI por autor desconocido. Hay quien especula que cada uno de los tramos pudo ser realizado por un artista distinto pero lo que no cabe duda es que responde a todo un programa iconográfico. El programa responde a la ideología moral y religiosa de caballero del Toisón de Oro[30]. Los relieves están inspirados en las tres etapas de la vida, juventud madurez y vejez. Este hecho  está reafirmado por la representación de una de las pilastras de tres cabezas. En la primera pilastra aparece representado un peregrino. La escalera simboliza el ascenso a la sabiduría, la superación espiritual. El peregrino, que representa al hombre, al joven, al estudiante que se dispone a subir la escalera progresa hacia el saber, ascensión al conocimiento: exotérico, si se sube y esotérico si se baja. El ascenso ha de atravesar los peligros de la juventud, representados por la danza y los placeres. Esta época juvenil se representa con una danza morisca de ambiente festivo con un bufón, una cortesana y juglares. Si vence a la pasión, tras haber domado a los instintos, llega al amor puro, desprovisto de egoísmo material, al triunfo del alma sobre el cuerpo[31]. Una vez que el peregrino ha llegado al amor puro y platónico ha alcanzado la verdadera libertad. 

En el segundo tramo se representa la madurez mediante una contraposición entre el bien y el mal con la representación del hombre cabalgando a una mujer símbolo del domino de las pasiones y del control, frente a la representación de la mujer cabalgando al hombre, símbolo de la tentación y del pecado. Entre este tramo y el siguiente se eleva una pilastra con el relieve de Cupido envuelto en una red y con la flecha y las alas hacia abajo que refuerza el simbolismo del tramo anterior. En el tercer tramo se representa la templanza a través de una comitiva a caballo que se dirige a una hacia una figura con el pecho descubierto, que se ha identificado como la Amicitia, la amistad y el amor puro frente a las tentaciones. También aparece un trompetero vestido como estudiante que simboliza la victoria sobre las pasiones y que está en relación con la representación de un jinete alanceando un toro, símbolo de las pasiones[32].




Los enigmas del claustro

Cuando el estudiante entra en el claustro, se encuentra con una serie de enigmas que son como oráculos que la diosa de la sabiduría enseña para la vida a todo aquel que ha sido capaz de alcanzarlos. Y como muchos de los mortales no hemos alcanzado todavía ese estadio para poderlo alcanzar El Dios providente manda a su Hijo. En El se da el triunfo del amor, la justicia y la paz[33].

En el zaguán de entrada aparecen representaciones de los cuatro evangelistas, el rey David y otros profetas. En el patio las crujías hechas a semejanza de los Enigmas responden a todo un programa iconográfico. En el segundo piso destaca la biblioteca. La galería de la biblioteca fue la primera en construirse y en ella encontramos antepechos distribuidos en siete cuadros. Cinco están sacados de el Sueño de Polifilio

El primer enigma está conformado por dos relieves que aluden a la moderación; en uno aparecen dos niños sosteniendo una esfera con el lema: en el medio está la virtud. En el otro, una mujer sentada con una tortuga en una mano y en las otra dos alas en alusión al lema: Festina lente. El segundo enigma también presenta dos escenas; en la primera está Cupido lanzando flechas al cielo, en la segunda aparece entre dos personajes sujetando una cartela donde se lee nemo (nadie), en respuesta a la inscripción de la escena anterior: ¿Quién escapa al amor

En el tercer enigma hay dos escenas separadas por un candelero; de un lado un monstruo antropomorfo con tres cabezas y la inscripción. Herirá, triturará y reirá, en alusión al paso del tiempo; al otro un águila, símbolo de Júpiter, sobre los gigantes Tifeo y Briareo con el lema: No hagas ni digas nada contra Minerva. En el cuarto enigma aparecen numerosos objetos y una inscripción muy larga que hace referencia a que el hombre debe ofrecer los frutos de su trabajo a Dios. El quinto enigma contiene dos medallones; en el primero está la balanza de la justicia que no se deja influir ni por la amistad, el perro, ni por el odio, la serpiente. En el otro medallón aparece un caduceo con serpientes enroscadas y a los lados hormigas con el lema: La paz y la concordia hacen crecer las cosas, la discordia disminuye las grandes. En el sexto encontramos nuevamente una referencia a la moderación, Festina lente: Apresúrate despacio, con la figura de los delfines, símbolo de la rapidez y las anclas, símbolo de la quietud. En el último enigma se representan ocho serpientes enroscadas en dos grupos mordiéndose la cola en alusión al paso cíclico del tiempo.



El cielo de la Capilla 

Por fin el peregrino llega al cielo representado en la bóveda de la antigua capilla[34]. El llamado cielo de Salamanca fue una pintura mural realizada al temple por el gran pintor Fernando Gallego, máximo representante del estilo hispano flamenco en Castilla[35]. La pintura fue realizada hacia 1473 y formaba parte de la bóveda la primera biblioteca después convertida en capilla. La actual fue pasada a lienzo en 1951 y traslada al patio de las escuelas Menores. Se notan los rasgos renacentistas y el influjo de los pintores del renacimiento italiano. En 1845 se había publicado en Venecia el Poeticon Astronomicon y sus grabados sirvieron de inspiración a Fernando Gallego.

En el cielo se representan los signos zodiacales, los vientos y algunas constelaciones y planetas. Rodeando la bóveda corre la siguiente inscripción sacada del salmo 8: Veré tus cielos, obra de tus manos, la luna y las estrella que Tu creaste: “Videbo celos tuos, opera digitorum, lunam et stellas que tu fundasti”. El conjunto de cuarenta y ocho figuras contiene temas de astrología como los planetas (el Sol, Jupiter, Mercurio), las constelaciones boreales (Hércules, Serpentario), las australes (Hidra, Corvus, Crater y Rovur), la corona austral (el Ara, el Centauro, Navis), los vientos (simbolizados por cuatro cabezas), los signos zodiacales (Leo, Libra, Scorpio, Virgo, Sagitario), los emblemas de las artes liberales.

En la cátedra de astrología destacó la figura de Nicolás de Polonio desempeñó un papel importante en el descubrimiento del Nuevo mundo. No olvidemos que en la Universidad Colón hubo de reunirse con la Junta designada para discutir su proyecto. El significado de esta obra no deja de tener una cosmovisión de matiz político aludiendo al triunfo de la monarquía Imperial sobre todo el orbe de la tierra.



12.  Los temas más representativos

La ciencia y el camino de la vida. La ideología reinante de esta época de esplendor renacentista exaltaba la figura del caballero del Toisón de Oro como modelo de la integración moral y religiosa. Representa todo un programa estoico de superación de sí mismo y dominio de las pasiones para alcanzar el supremo bien. El supremo bien no es otro que Dios, en la figura de Cristo. Si la figura de Cristo es la encarnación de Dios, Carlos encarna la figura del caballero del Toisón de Oro[36]. El nuevo César Augusto del Sacro Imperio Romano encarna la victoria de los cristianos sobre la herejía. Los jinetes en cabalgata representan la victoria y la conversión de los caballeros árabes reconocibles por sus inconfundibles escudos y turbantes. Se sublima la Cruzada como el objetivo primordial del Emperador.




Representación del tiempo 

Se concibe el devenir y el paso cíclico del tiempo: Así, unos tras otros, siguiendo las mismas huellas se van sucediendo los años. Se hace necesario entrar en la cosmovisión del espacio y del tiempo de la época para poder descifrar el mensaje iconográfico. No hemos de olvidar que el Renacimiento trae un cambio de paradigma. Después de una percepción oscura y gris de la vida, todo es vanidad, se pasa a una exaltación de la vida que orienta la vida esperanzada al triunfo definitivo. La vida la vive el hombre en una lucha entre las fuerzas de la vida y la muerte. Entre los enigmas se descubre la figura de un águila como Júpiter acompañada de los gigantes Tipheo y Briareo que lo intentaron destronar. Estas figuras hacen alusión al Tiempo y la Inteligencia.



Las edades del hombre 

La vida se concibe como un camino de distintas etapas en la que hay que superar diversas pruebas. El hombre como peregrino tiene que recorrer las distintas etapas. La universidad se concibe para adiestrar al estudiante en el camino para adquirir la verdadera sabiduría venciendo las tentaciones a los que se enfrenta el joven estudiante. El joven estudiante debe distinguir el camino del bien y la verdad venciendo el desenfreno de las pasiones que le conducen a su ruina.



La cosmovisión de la época 

El conjunto iconográfico enormemente rico deja ver toda un programa con  figuras simbólicas alusivas: El águila representación de Júpiter, la abeja como la mujer laboriosa, la tortuga como paciencia, el ancla como soporte y estabilidad, el carnero como padre divino, la serpiente como la tentación, la calavera que simboliza el pecado de la lujuria simbolizado por la rana con la asociación a la muerte y al infierno[37]. También aparecen los distintos oficios: Los artesanos, los agricultores, los comerciantes, los pescadores, los marineros, los cazadores, los soldados o guerreros



La concepción del amor. 

La verdad y el amor están relacionados porque el hombre está llamado a distinguir y saber elegir entre el amor falso y verdadero. El amor está cautivo y precisa ser liberado y redimido del yugo de las pasiones. Hay que saber distinguir entre el amor lascivo y el amor platónico[38]. El hombre debe saber elegir.  En el segundo enigma de la galería del claustro se deja ver el significado del verdadero amor conyugal. Frente a la cortesana del equus eroticus aparece el segundo equus cabalgando hacia la mujer virtuosa. El pudor es el bien más preciado que se pueda añadir a la virtud y a la castidad.





13.  La búsqueda de la verdadera sabiduría

La iconografía es muy rica en simbolismos y una figura puede tener distintas interpretaciones y alusiones. Es verdad que hay figuras que con un significado polivalente encierran una excepcional riqueza simbólica. Lejos de perdernos en una meticulosa interpretación de cada figura lo que de verdad interesa es hacer una lectura de su conjunto.

El ideal supremo. Todo el programa iconográfico responde a un sentido didáctico. No hemos de olvidar nunca el fin. La meta suprema de la vida del hombre es su orientación divina y trascendente Pero su meta divina no debe de alienar al hombre de esta tierra. Es a través de la Amicitia que el hombre se encamina a lo divino[39]. La meta suprema y culminación hacia lo alto, Ad summun caeli, no debe al hombre sustraerle de su tarea en esta tierra. El reino celeste debe tener una plasmación y encarnación aquí en la tierra. Aunque esta plasmación aquí en la tierra será finita y limitada habrá de reflejar la orientación divina: Aquí en la tierra como en el cielo.

La verdadera sabiduría, la inteligencia. La búsqueda de la sabiduría supone toda una gradual ascensión en la búsqueda de la verdad y del bien. Conviene destacar como la puerta de entrada representa con esa doble puerta el acceso a la sabiduría. El zaguán abre el camino amparado por los profetas y los evangelistas y se asciende por la escalera que deja ver el programa espiritual hasta acceder a la biblioteca sede y alma el saber.

Los dos caminos: la dialéctica virtud-vicio Areti y Chachia. Aparecen figuras alusivas a las virtudes como la justicia, la templanza, la prudencia, clemencia, la amistad y a los vicios: la lujuria, el dinero, la fama, la fortuna, el odio, etc. Los dos caminos, que se representan en la doble puerta, uno ascendente y el otro descendente representan el camino del bien o la virtud y del mal o el vicio.

La síntesis. Todo el programa iconográfico trata de hacer una síntesis: Dios y el hombre, el poder divino y el poder humano, el papado y la monarquía, la gloria y la vanagloria, la virtud y el vicio. En el medio está la virtud. Se hace uso de todo el género sapiencial con diversos dichos sapienciales que aluden a esto: Apresúrate despacio, Atempera tu velocidad sentándote, Atempera la tardanza surgiendo




14.  Un estudio iconográfico de la fachada de la Universidad

La fachada corresponde al tipo de denominado de estandarte, constituye un verdadero tapiz de piedra. La fachada de la Universidad sita en el patio de las escuelas Mayores es el pórtico de entrada y constituye el máximo exponente del denominado estilo plateresco que incorpora ya todos los recursos propios del Renacimiento. Sus relieves aumentan de volumen según gana en altura para poder ser vistos por el espectador. Sus maestros autores son desconocidos.se ha especulado con la presencia de maestros como Juan de Álava o Enrique Egas. La fachada se compone de tres franjas horizontales y cinco verticales. Su composición se caracteriza por una apretada decoración característico del denominado horror vacui, tan del gusto hispano de la época. La fachada responde a todo un programa iconográfico

Estudios han querido atribuir el diseño iconográfico a Fernán Pérez de Oliva, humanista cordobés y maestro de la propia Universidad que desarrolló además el programa iconográfico del colegio de Fonseca. La fachada posee un complejo diseño bajo toda la iconografía que lo oculta. Se inscribe enteramente en un rectángulo áureo[40]. Esta proporción áurea responde a los cánones de la antigüedad clásica y ha sido asociado con la mística y la perfección. En la decoración aparecen una serie larga de rectángulos cuya proporción esta en relación del ancho entre los dos pilastronas extremas. La altura de los dos frisos intermedios es proporcional mediante esta proporción áurea a la anchura de las pilastronas. Otras partes de la decoración responden a alturas dobles del ancho como las puertas hasta las claves o los casetones de Venus y Hércules. Toda la iconografía principal queda comprendida en el área de la circunferencia con centro en el cruce de las diagonales, que es el centro de la Corona.

Toda la iconografía responde a un imponente programa con una fuerte carga ideológica. La fachada estructurada en tres cuerpos sigue una graduación ascensional de todo un cuerpo genealógico. El primer cuerpo está dedicado a los fundadores, los Reyes Católicos que serían los abuelos; el segundo cuerpo está dedicado al Emperador reinante y el tercero responde al nivel divino, al Papa y a dioses de la mitología. Todo el programa iconográfico apunta a la exaltación de la romanidad y de lo heroico en las letras, el arte, la política. No olvidemos que bajo el rey Carlos y luego su hijo Felipe el Imperio real accede a su cúlmen más glorioso en parangón con los césares Augusto, Constantino, Alejandro Magno o Carlomagno. El Imperio español extendió su gloria más allá de las columnas de Hércules a un nuevo mundo, su poder alcanzó el océano y su fama el cielo[41].




El Cuerpo inferior

En el primer cuerpo resalta el gran medallón central con las figuras de los Reyes Católicos. Se ha comparado esta imagen con los grandes sellos monárquicos medievales o con las monedas de los emperadores romanos. Sus nombres están grabados y alrededor la inscripción en griego ya mencionada[42]. Los Reyes Católicos representan una imagen sacralizada del poder. El saber debe ponerse al servicio del poder  imperial y Papal, del Imperio terrenal y celeste para la gloria del Imperio y de Dios[43].




El Cuerpo central

En el segundo cuerpo, en el centro geométrico de la fachada, debajo de una magnífica corona, resalta el escudo de Carlos, es decir su genealogía emblemática, rodeado por el collar del Toisón. El rey Carlos se consideró verdadero caballero de la Orden del Toisón. El toisón que recibió de su abuelo el Duque de Borgoña fue no solo su estandarte sino su ideal hasta el punto de comprometer por él toda su política imperial. No olvidemos que como caballero del Toisón encarna el ideal cruzado en su lucha contra los herejes. La figura de Carlos será pues el eje central del conjunto. A los lados del escudo de Carlos aparecen otros dos representando las águilas de San Juan y la bicéfala imperial. Junto a estos escudos aparecen dos medallones con sendos bustos, uno masculino y otro femenino que representarían la figura del César Augusto Carlos V y la de su esposa Isabel de Portugal. Seguramente ellos fueron los donantes y patrocinadores de la misma fachada.



El Cuerpo superior

El cuerpo alto central lo preside la figura del Papa rodeado de sus cardenales. Destaca así la hegemonía del Papado del Sacro Imperio Romano. La tiara, las llaves y la cruz que aparecen en el escudo dejan ver que la Universidad, no lo olvidemos tiene su origen en una fundación catedralicia. A ambos lados aparecen dos divinidades Hércules y Venus. Son los dioses tutelares del Imperio Romano. Hércules, liberador de la humanidad y rey prudente y Venus, madre de los emperadores romanos por mediación de Eneas y César. De cada lado de estas figuras se insertan cuatro medallones con cabezas y en el entredós, encima de las águilas y los monarcas cuatro conchas enmarcan otros bustos. En estos ocho personajes se pueden identificar a Baco situado a la derecha de Venus y seis personajes imperiales históricos: César, Augusto, Alejandro en los medallones y Trajano, Escipión y Marco Aurelio en las conchas. La cuarta concha corresponde a Sibila anunciadora del retorno de la Edad de Oro. Los símbolos alegorías y atributos varios de justicia, concordia y abundancia quedan representados por serpientes, delfines, etc. Toda la iconografía da razón del programa de exaltación del mito imperial exaltando la figura de Carlos como el nuevo César Augusto de la humanidad en su intento de unificar todos los pueblos.



La famosa rana

El famoso "enigma" situado sobre la ornamentada pilastra de nuestra derecha, debajo del primer friso, La rana universitaria. Es un capitel que termina en tres calaveras y sobre una de ellas hay colocada una rana o batracio. Partiendo del pasaje del Ap 16,13 identifica la rana con el espíritu maligno y unido a la calavera-muerte aparece frecuentemente en las representaciones de finales del S XV y principios del XVI, en contextos relacionados con pecados de la lujuria y su castigo. concluye en que su significado es una meditación sobre la lujuria castigada eternamente, dirigida especialmente a la juventud. La rana, que algunos consideran mejor como sapo, es una representación del defecto o vicio, que al igual que en las misericordias de los coros, está para ser aplastado por el peso superior. En 1979 se añade la representación del bufón, en la cúspide de la fachada, como resumen y recuerdo del "memento homo quia pulvus eris".



Interpretación histórica y mitológica de los cuerpos

Hay tendencia a considerar las dos primeros cuerpos con un sentido histórico, el de la fundación y construcción de la Universidad salamantina, para terminar con sentido mitológico, pero no desatiende la posibilidad de que hayan representado las ciencias que se imparten o las virtudes encarnadas. En el tercer cuerpo ve las estatuas de Venus y Hércules aunque no les encuentra relación contextual; Ios medallones relacionados con ellos se definen por los adornos emblemáticos inferiores: balanza con casco podría representar la Ley civil, quizá sea la Gramática el siguiente por pensar en la representación de una llave en vez de un cetro, el tercero pudiera ser la Dialéctica o Medicina o Prudencia y el cuarto la Retórica, si bien encuentra difícil estas dos últimas suposiciones, más en relación con Venus y Hércules, salvo que pudiera hablarse de un "Hércules gálico". Las representaciones de las virtudes relacionadas con Hércules prudencia y valor.



Interpretación simbólica según Filarete

Una interpretación simbólica de la fachada que parte de la lectura del libro XVIII del tratado de arquitectura de Antonio Averlino, llamado el Filarete (1464) El punto de arranque, análisis y conclusiones sobre Ia fachada son los siguientes:
1.-, El tratado Filarete expone la composición de la "Casa de la ciencia"; esta casa de la ciencia y del vicio que expone Filarete es considerada como la primera concepción simbólica de la universidad, y quiere adaptar su descripción a la fachada de la Universidad de Salamanca.
2.- Continua con un análisis estructural en el que divide la fachada en dos lados por su eje; la derecha del espectador será el lado de la virtud y la izquierda el del vicio, con las respectivas puertas de Filarete, "Areti" y "Chachia".
3.- Toma la interpretación de la rana, enigma al que le concede el título de "voluptas cum tristitia" que era el que Filarete le había dado a la puerta del vicio, y por ello supone que este "enigma" fue concebido para ser colocado en la parte opuesta.
4.- Tras recoger las identificaciones anteriormente descritas en el primer cuerpo, los grandes medallones del  segundo cuerpo son Hércules y Ebe (como antecedentes de la monarquía hispana); en este mismo cuerpo, los personajes colocados en las conchas son identificados con Venus y Sardanápalo o Heliogábalo. En el lado del vicio. y Escipión el Africano y Anibal o Alejandro en el lado de la virtud.
5.- En el cuerpo superior ve a Venus que, por haber perdido la castidad, lleva la columna rota, a ambos lados de ella aparecen Píapo y "Baco padre de Venus", en el lado opuesto Hércules entre Juno y Júpiter.
6.- Justifica todas estas interpretaciones con un cuadro dialéctico de los opuestos "virtud y vicio" a modo de psicomachia medieval unido a otras interpretaciones simbólico-iconográficas consiguiendo, con todo ello, dar una verosimil idea de que la fachada universitaria salmantina reproduce aproximadamente Ia concepción de Filarete.




Otra interpretación semántica

Existen otras interpretaciones sugeridas por otros estudiosos. Donde había identificado a Venus y Sardanápalo son Jasón y Medea, ésta con "mirto maritalis". Al lado de Venus aparece ahora Marte con el signo zodiacal de la Balanza (Libra) y casco de bastardía. A los lados de Hércules, Fedra como virtuosa y Teseo.
Otro autor divide la fachada en sus tres cuerpos naturales, de inferior a superior. En el primer cuerpo, el medallón de los Reyes Católicos interpretado de una moneda de la época y con la inscripción en griego: “los Reyes a la Universidad y esta a los Reyes”, sobre la cual opina que debe aplicarse a los tres niveles: reyes, emperadores y Papa, colocada en este lugar para poder ser leída. En el segundo cuerpo, además de los escudos de Carlos V, el águila imperial bicéfala, y la real hispana, aparece Carlos V heroizado, a la romana, como se le representó en monedas del reino de las Dos Sicilias, su lógica compañera será Isabel de Portugal, calificada como fuerte. En las conchas supone a dos guerreros como custodios de los blasones y los otros dos personajes "una dama prendada de Carlos V" y el duque de Gandía, que tanto admiró la virtud de Isabel. La emperatriz viene caracterizada como fuerte por el blasón similar a Palas, que aparece sobre ella. Por llegar a la conclusión de que la representación de Carlos V está inspirada en las monedas acuñadas tras su coronación, deduce que esta parte de la fachada, si no toda, debió realizarse entre 1530 y 1533. 

En la parte superior justifica la identificación del papa como Martín V, comparando su efigie con el sepulcro de San Juan de Letrán y con la estatua sedente de la catedral de Milán, cree que el detalle existente sobre la tiara es la columna heráldica con la corona de barón, divisa de la familia. Supone que la escena representa la concesión de unos títulos económicos al claustro salmantino, avalado por dos cardenales, "libretos o documentos" que porta el Papa en la mano izquierda. En los edículos laterales ve a Eva, que porta en la mano la hoja de parra con la que se tapa el pudor (muestra foto de ello) y la columna rota, como su vida; su compañero lo hace Adán, cansado, no apoyado en una clava sino en una muleta. A los lados de nuestros primeros padres situa a Caín y Abel y a sus respectivas esposas, éstas en torno a Adán, lo cual justifica con explicaciones verosímiles y elaborando una teoría religiosa de recordatorio bíblico que tiene su base en el "creced y multiplicaos" que se realiza por la unión de los hijos, nietos de Adán, una vez olvidado el homicidio.



La Universidad de Salamanca cuna de la Reforma

El posible un sentido semántico del copiado panel en esta zona, con el original título de “victoria augusta”. Si tiene un significado, más allá de lo meramente ornamental, ha de ser el de su título original aplicado pues al Emperador, como protector y defensor universitario, que quiere decir en el momento lo mismo que teológico, no olvidemos que en l52l el Edicto de Worms pretendió solucionar el conflicto religioso y que Salamanca se la considera “la cuna de la Reforma de los estudios religiosos", "la neo escolástica del S XVI" debida en gran parte a Francisco de Vitoria, a su vuelta a esta universidad en 1526, de aquí saldrán teólogos para las universidades de Europa.

En el primer cuerpo el medallón de los Reyes Católicos, lleva el yugo y las flechas intercambiados para destacar el "Tanto Monta", pero el cetro lo sostiene Fernando por la parte superior mientras extiende la palma abierta en signo de liberalidad. En este medallón se quiere evitar toda duda de interpretación: son los reyes, ya históricos, que con su poder y liberalidad han patrocinado el edificio nuevo y desarrollo universitario, la universidad a través de sus intelectuales y teólogos devuelve a la monarquía sus favores, y efectivamente, no solo en la época a la que alude el medallón, sino en la de Carlos V que es cuando se construye.

El segundo cuerpo, también ordenada jerárquicamente, nos presenta, además de los blasones del emperador Carlos V, del águila imperial y de la real de España, dos medallones y otros cuatro personajes. Los blasones mismos hablan de forma anacrónica del Emperador. El medallón de nuestra izquierda no se le parece en nada a Carlos V ni a Hércules. En un nivel histórico y apoteósico, en el que está situado, hay que pensar en un recordatorio de monarcas anteriores, históricos, benefactores de esta universidad. A modo de hipótesis nos inclinamos a pensar más que en su fundador Alfonso IX se trataría de Fernando III, el Santo, que unió definitivamente las coronas de Castilla y León y pudo ser considerado emperador como sus antepasados, idea que ambicionó su propio padre, si es así su pareja es su esposa Beatriz, hija del emperador de Alemania y nieta del de Oriente, calificada como fuerte por el blasón de Palas, colocado sobre su cabeza. También pudiera tratarse de Alfonso X y Violante de Aragón, hija del Conquistador. 

Una inscripción junto a la capilla, nos hace sospechar en que pueda tratarse de Alfonso VIII de Castilla, ya que se le tenía como fundador de la Universidad, si la inscripción es más o menos contemporánea a la fachada no sería nada extraño que el representado sea el héroe de las Navas y su mujer Leonor Plantagenet. De izquierda a derecha pueden ser identificados como Minerva, Hércules, Escipión el Africano y Anibal; de ellos sólo Hércules y Escipión tienen una apoyatura de parecido gráfico. Nos inclinamos por la opinión de Anibal porque de esta manera los tres héroes están intimamente relacionados con Salamanca. La doncella es Minerva, en un parecido intencionado con la "Minerva y el centauro"; los tres anillos o triple lazo que lleva en la cabeza son emblema de los Médici, así debe pensarse que está aquí por ser diosa de la sabiduría, la universidad misma, o más bien "la sana doctrina de la academia", aunque no se pueda pensar en un sentido neoplatónico.

En el tercer cuerpo tenemos así un nivel totalmente histórico, recordatorio de la fundación de la Universidad asÍ como de las grandezas históricas de la ciudad. En el cuerpo superior tenemos una Venus-Eva con recuerdo de Fortaleza, un recuerdo del Hércules Farnesio así como cuatro medallones con una serie de instrumentos símbolo y en el centro un Papa que dirige desde su cátedra una explicación a un grupo de cardenales. Esta escena del Papa, unida arquitectónicamente con la calle central, la debemos interpretar de manera similar a la de los reyes; como recordatorio histórico nos habla de las bulas pontificias dadas a favor del "Estudio" desde Alejandro IV, pero además se trata de un Papa en su cátedra impartiendo doctrina, lo que habla del quehacer cotidiano de la universidad y en especial de la Teología, por la que sin duda se distinguió Salamanca. Esta cátedra también se representó en la entrada al patio de las "Escuelas Menores" de la misma Universidad, con la inscripción "omnium scientiarum princeps salmantica docet"

Por su fisonomía está cercano a Adriano VI, preceptor de Carlos V, regente de España en 1520, el primero que luchó contra el luteranismo, su apellido era Florensz y se distinguió sobre todo por su austeridad y auxilio a los pobres. Sánchez Reyes alude a los detalles sobre la tiara, que nos parecen un lirio y efectivamente unas monedas o besantes. Besantes, el superior con lises, es el emblema de los Médici, en esta época Clemente VII (1523-1524), pero deberían aparecer ordenados al modo heráldico para que pudiera entenderse que se hacía una alusión de este tipo, por otra parte su fisonomía no coincide con la conocida de este papa.



Descifrando el jeroglífico desde la clave de la Hypnerotomachia Poliphili

Quizá estemos ante un “Jeroglífico" como otros que a continuación veremos aludiendo al papa Adriano Florensz de Utrecht, a través de la representación de una florecilla, lirio, y unas monedas por su famosa actividad caritativa. Vamos a continuar nuestro examen centrándonos en los cuatro medallones con sus instrumentos-símbolo o atributos. En una lectura primaria pudieron verse, ya en su tiempo, las cuatro virtudes cardinales, Justicia (balanza), Templanza, Prudencia (serpientes) y Fortaleza (trofeos militares), pero la representación de unos personajes con estos símbolos obliga a pensar en que lo representado no son virtudes, sino que tales cualidades pueden adornar a los representados, por otra parte los atributos de las virtudes aparecen acompañados de otros difíciles de interpretar. La balanza aparece en su justo equilibrio con los platos cargados, uno de frutos y otro con una pesa. Todo lo cual nos habla del justo medio.

Tomando como clave la Hypnerotomachia Poliphili, y utilizando algunos de los jeroglíficos que se habían copiado en el Claustro se pude avanzar en la interpretación. El medallón del cual están suspendidos estos atributos tiene un rostro enérgico y fuertemente viril cuyo pelo parece adornado con hoja de yedra, la cual consideramos como atributo de la Fama, pues con tal sentido que frecuentemente representada en el renacimiento. El segundo medallón nos presenta un hombre de rostro duro, rigurosamente rasurado y coronado de laurel (símbolo de triunfo, siempre positivo), bajo él pende un pequeño medallón con la desencajada cabeza de Baco, un cetro en sentido horizontal (signo de poder y mando) del que penden unas flores sencillas con estambres o frutos redondos. Si en el lado diestro del programa veíamos a dos varones maduros, al otro lado vemos dos bellos jóvenes, uno de los cuales ha sido considerado como mujer y otro similar a un Antilope. 

El primer personaje va con la cabeza cubierta "capite velato" lo cual en un contexto romano, que aquí se imita, indica sacralidad, además, reforzándonoslo, cuelga del medallón una calavera con dos culebras (con cabezas como dragones) y una cartela con una cabecita de ángel; todo lo cual indica reflexiones sobre el Más Allá. El cuarto es un joven militar (al modo de un Alejandro) con sus armas, aparece un cetro con la cabeza inclinada (el poder caido) y todo se apoya en un mechón.[44] Hablando de Cleóbulo nos cuenta Diógenes que "algunos lo hacen descender de Hércules, y dicen que fue robusto y hermoso de cuerpo y estudió la filosofía en Egipto... renovó en Atenas el templo de Minerva... compuso cánticos y sentencias oscuras". Entre sus sentencias aconseja "guardarse de la calumnia de los amigos y de las asechanzas de los enemigos... que amemos más el estudio que la ignorancia" etc. Su apotegma es "La medida es lo mejor de todas las cosas".

Estas observaciones fueron recogidas por Alciato quién le colocó la balanza como seña, "del cual seña serán el peso y pesas ayuntados". Consideramos que la opinión común de los humanistas del siglo XVI debió ver en este personaje a Cleóbulo con sus divisas: balanza con su peso y ponderal en equilibrio, el casco como custodia, alusión a otro de sus aforismos y quizás a la renovación del templo de Minerva (la Universidad) y la yedra por su fama y "furor poético" ya que compuso cánticos. Periandro, rey de Corinto, es el prototipo del isáurico, no obstante, a pesar de todos sus males, fue venerado como sabio por los de Corinto, donde favoreció al máximo el culto a Baco, haciéndolo oficial. Su duro rostro y el cetro lo dehnen, la cabecita de Baco es sin duda una alusión a la ira, tanto de él como de su hijo Licofrón.

Alciato pone en boca de Periandro el dicho de "refrena la ira" y como divisa un ramo de poleo, como hierba medicinal que calma el flujo de la bilis. La planta y flor aquí representada, dentro de su arbitraria ejecución, no es poleo y más se acerca a la flor y fruto del tilo, conocidos por sus efectos tranquilizantes. El tercer medallón puede tratarse de Heraclides, natural de Heraclea en el Ponto, que vino a Atenas para aprender de los filósofos, llegando a ser discípulo de Aristóteles. Diógenes nos cuenta que "usaba vestido de suave paño" y humorísticamente fue llamado "pómpico" procesional y ceremonioso. Escribió muchas obras, sobre la Justicia, Templanza, Piedad, Fortaleza, Virtud, de Io que hay en el cielo, en el infierno, y también tragedias, etc. Liberó a su patria tiranizada y aspiró a que sus conciudadanos pensaran que había sido divinizado a su muerte, para lo cual inventó una treta: "crió un dragón desde pequeño hasta la magnitud justa y hallándose ya cercano a la muerte, llamó a un confidente suyo y le encargó que luego que muriese escondiese su cadáver y pusiese el dragón en la cama para que pareciese que había él ascendido a los dioses...".[45]

Esta visión del personaje justificaría su aspecto y los elementos pendientes del medallón: "capite velato" cual sacerdote, calavera por el cadáver, serpientes-dragones y ángel como subida a los cielos. El cuarto medallón parece referirse a Pitaco, general de los mitilenos en su lucha con Atenas, por sus méritos le otorgaron el mando de la república que dejó voluntariamente después de gobernarla diez años. A ello debe referirse las armas así como el cetro inclinado hacia abajo. El mechón de pelo puede aludir a una anécdota que cuenta Pánfilo y recoge Diógenes: "estando Tirreo, hijo de Pitaco, en la ciudad de Cumas sentado en la casa de un barbero lo mató un broncista tirándole un hacha; y que habiendo los cumanos enviado el agresor a Pitaco, éste, sabido el caso, le absolvió diciendo que el perdón era mejor que el arrepentimiento". Estas suposiciones pueden parecer débilmente demostradas y a más de uno caprichosas, aunque dentro de los posible, pero éste es el lenguaje jeroglífico que se usa en los principios del siglo XVI.[46]

Pensemos que unos años antes, se copian unos jeroglíficos en el patio de esta Universidad, extraidos directamente en el libro, la Hypnerotomachia Poliphili,[47]. En un sentido superficial, sin duda, en estos cuatro personajes puede verse, por sus atributos, una alusión a las cuatro virtudes, pero en significado oculto lo que hay son cuatro sabios de la antigüedad griega (en correspondencia con la inscripción del primer cuerpo), pues es Salamanca la que quiere dejar patente que si su centro lo ocupa la Teología, a su verdadero conocimiento, ahora en el Renacimiento, sólo se accede a través de los originales griegos de las escrituras y de los hebreos, según el pensar de Erasmo cuyos adagios aquí también se aluden. Siguiendo este pensamiento y lenguaje las aparentes figuras de Venus y de Hércules no pueden ser estrictamente unos dioses, ni tampoco Eva y Adán. Ambas llevan en sus pedestales una cabecita de mujer y de varón como va a ser costumbre encontrarlas en el Renacimiento, estas cabezas significan en el momento la protección de la entrada contra el demonio y las asechanzas de los hombres, esta misma función cumplen las dos imágenes superiores de varón-Hércules y de mujer-diosa, así como la superposición de medallones con las efigies de varón y mujer en los diversos pisos, no olvidemos que la inscripción en griego del primer cuerpo “los Reyes a la universidad y esta a los Reyes”, donde el verbo va elíptico y debe sobreentenderse protege o sirve, como efectivamente así era; tampoco olvidemos que uno de los significados específicos de Hércules en la puerta es éste. Además de esta primera especificación, sin duda estas figuras tienen otra más oculta[48].

La letra del epigrama se inicia cantando la sabiduría y elocuencia del héroe, pero además el propio Alciato dedica a Hércules-elocuente un emblema, ya en 1531, en el que aparece la conocida imagen del "Hércules gálico", "para los franceses la oratoria no se representa por Mercurio como para los griegos sino por Hércules, por ser éste más fuerte y gallardo que aqueI, se le representa viejo porque la facundia y elocuencia se manifiesta eficaz y perfectamente en la vejez"[49]. Consideramos que el significado de este Hércules no puede ser exclusivamente el de la elocuencia, puesto que su imagen no corresponde a la del "gálico", pero sí recoger la elocuencia así como la sabiduría y fuerza de ánimo, pues tal es el sentido de Hércules en estos momentos del Renacimiento33, además del de la protección ya explicado. La aparente Venus, con un gesto de pudor, tapa su sexo con una hoja, mientras apoyándose quiebra por Su base una columna. No se conoce en la historia de la iconografía una imagen similar, que además tampoco podemos decir que sea Eva, pues el gesto no parece privativo de nuestra primera madre. que se trataba de la fortaleza, por la columna, y efectivamente este es el atributo de tal virtud el portar la columna rota es contagio bíblico de Sansón[50].

Numerosos son los ejemplos del Renacimiento en los que vemos a la Fortaleza con la columna rota, pero además es el atributo de la Castidad y de la Virtud en general. A modo de Venus desnuda en el Renacimiento se va a representar no sólo a esta diosa sino también a la idea de la Castidad y a la Verdad.[51] Otras muchas virtudes aparecen en el Renacimiento desnudas o semidesnudas y con rasgos de "pudicitia", pero de ellas es la "Veritas" la menos contagiada de pudor. La columna aunque en algún caso acompaña a la Castidad lo hace para calificarla de virtud,[52] lo que aquí se representó fue una Minerva púdica y como tal, virtud de fortaleza de ánimo, como la diosa también es la sabiduría se nos muestra como la Verdad, totalmente desnuda.

Según estos razonamientos tendremos en la zona superior una especie de resumen universitario de la Salamanca de principios del S XVI. Así la teología se acompaña de la verdadera ciencia y de la elocuencia, rodeada de sus fuentes que son la sabiduría griega; pero todo ello va sostenido por unas calaveras, especialmente las columnas del dosel del Papa, lo que quiere decir que todo saber pasa por la contemplación de la vanidad humana o reflexión sobre la muerte. Si el personaje de la cúspide es efectivamente el "bufón" y tiene un significado más que ornamental, nos encontramos con un motivo muy frecuente de contraste en la primera mitad del siglo XVI, el bobo como contrapunto de los temas más serios. ¿No estará este personaje para advertirnos de nuestra propia ignorancia?



Resumen de la reflexión

La universidad de Salamanca se concibe como cas y sede del saber para acceder a la verdadera sabiduría. De acuerdo con el ideal humanista y renacentista que promueve Francisco Vitoria se costituye en “la cuna de la Reforma de los estudios religiosos", "la neo escolástica del S XVI" Es el fin de una época, del Medievo y el comienzo de una nueva, el Renacimiento. Se observa el cambio de paradigma de un modelo teocéntrico a un modelo antropocéntrico, de una sociedad teocrática a una sociedad monárquica y democrática. Se trata del momento cumbre del siglo de Oro. Concurren una serie de hechos totalmente singulares. El auge y el esplendor del Sacro Imperio Romano bajo la figura imperial de Carlos V, el descubrimiento del Nuevo Mundo y de la expansión cultural en Hispanoamérica, la reforma católica frente a la contra reforma protestante.

A través del estudio podemos acercarnos a descifrar su autoría y la fecha de su ejecución. Desechadas las opiniones erróneas podríamos aventurar que la fachada de la universidad de Salamanca, construida entre los años de 1513 a 1525 y sin duda terminada ya en I 529 o 1533. Podriamos considerar la fachada dentro de la tipología de una "fachada estandarte" con lo que deberíamos suponer portadora de un mensaje de un nuevo tiempo.

La iconografía de la fachada de la universidad es, un anuncio específico de acceso al verdadero saber a la verdadera sabiduría, la ostenta la búsqueda del bien y la verdad y trata de defender su ingreso del camino del vicio y del mal. A través de sus tres niveles y de distintos elementos, en lenguaje jeroglífico, a modo apotropaico, se defiende el ingreso contra el demonio, males y malos, incitando a la reflexión de la vanidad humana. Los reyes la protegieron y la protegen y ella les devuelve el favor. Se alude a la grandeza y antecedentes históricos, se le pone bajo la protección de Minerva, Hércules y otros héroes. Y por fin, se expone su propio contenido, la Teología y la Filosofía y conocimiento griego, así como la fuerza de la verdadera ciencia y elocuencia.[53]








BIBLIOGRAFIA

Estudios sobre los orígenes de las Universidades, Universidad de Valladolid, Valladolid 1988
Nieto González José Ramón; La Universidad de Salamanca, Escuelas Mayores, Menores y Hospital del Estudio. Gruposa, Salamanca, 2002
Alejo Montes, Javier; La Universidad de Salamanca bajo Felipe II, Junta de Castilla y León, Consejería de Educación y Cultura, Valladolid 1998
Gabaudan Paulette, El mito imperial, programa iconográfico en la Universidad de Salamanca, Junta de Castilla y León, Consejería de Educación y Cultura, Valladolid 1998
Gabaudan Paulette, Iconografia renacentista de la Universidad de Salamanca, Ediciones Universidad de Salamanca 2005
Cortés Vázquez, Luis; Salamanca dieciséis claves, Librería Cervantes, Salamanca 1991
Cortés Vázquez, Luis;   ad Summum Caeli, el programa alegórico humanista de la escalera de la universidad de Salamanca. Salamanca 1967
Cortés Vázquez, LuisUn enigma salmantino, la rana universitaria, Salamanca 1971
Pereña Luciano, Vicente; Manifiesto de la Escuela de Salamanca, Universidad pontificia de Salamanca, Fundación Pablo VI, Madrid 1993
Sánchez Reyes Enrique; La lección humana de la Universidad de Salamanca, Salamanca, 1967
Sánchez Reyes Enrique; La fachada universitaria salmantina y sus secretos, Gráficas Cervantes, Salamanca, 1979
Sánchez Reyes, Enrique; Miscelanea de estudios sobre las sabias piedras de la Universidad salamantina, Gráficas Cervantes, Salamanca 1983
Santiago Sebastián y Luis Cortés, Simbolismo de los programas humanísticos de la Universidad de
Salamanca, Salamanca, 1973
Cirilo Flórez Miguel, Pablo García Castillo, Roberto Albares Albares; El humanismo científico, Salamanca 1988
Alciato, Andrés;  Emblemata, Lyon, Matias Bonhomme 1550, no 186. Ed de Santiago Sebastián, ed. .A.kal. Madrid 1985
Juan F., Esteban L.; La fachada de la Universidad de Salamanca, crítica e interpretación, Salamanca



[1] El programa iconográfico en busca del sentido simbólico de composición de sus imágenes fue desarrollado de forma especial por estos dos investigadores. Programa iconográfico de la Universidad de Salamanca, p. 23
[2] Fr. Beltrán Heredia O.P. es uno de los historiadores que investiga los orígenes de la Universidad, Bulario de la Universidad de Salamanca 1219-1549
[3] Los estudiantes legistas y canonistas consultan las producciones de Bolonia y las decretales pontificias coleccionadas por san Raimundo de Peñafort. Los de medicina consultan los tratados árabes y judíos de la escuela de Sevilla y de Toledo.
[4] Afonso IX toma Salamanca como punto estratégico y centro de operaciones en la lucha contra el moro invasor. Es por eso que concede a la ciudad, con enormes posibilidades culturales, artísticas y políticas, el privilegio de la fundación de la Universidad.
[5] El cuadro del retablo de la Capilla da cuenta de este hecho.
[6] En el presente dicha capilla se encuentra en restauración y no sabemos cómo se dispondrá en el futuro.
[7] De ahí la expresión de salir por la puerta de los carros
[8] Gómez Moreno y Menéndez Pelayo analizan los orígenes de la Universidad de Salamanca. Enrique Sánchez Reyes los recoge en su libro Fundación de la Universidad de Salamanca, p. 15
[9] Así reza en doradas letras sobre mármol blanco una lápida colocada en el claustro alto de la Universidad de Salamanca a la entrada al salón de la gran biblioteca.
[10] El mismo rey inauguraba las obras, alentaba a los artistas y volcaba libremente sus tesoros. Enrique Sánchez Reyes los recoge en su libro Fundación de la Universidad de Salamanca, p. 16
[11] Hay toda una controversia en la localización de la nueva fachada. Los había quienes pretendían que la nueva fachada diera salida a la Catedral Nueva. La fachada original previa a la que se construyó era de mampostería de piedra austera y de traza gótica.
[12] En el momento en que se esculpió la fachada, Carlos V, estaba pendiente de su coronación por el Papa Clemente VII. Quizás sea por eso que en su medallón ataviado con los atributos imperiales no aparece coronado.
[13] La Universidad se convertirá así en ese alma mater al calor de su regazo, crecen, se forman y educan los estudiantes. Fundación de la Universidad de Salamanca, p. 20
[14] El tiempo discurría desde el día de San Martín, en noviembre, al siguiente San Martín.
[15] De su primitivo amueblamiento nada queda pero como el aula de Fray Luis de León tuvo los elementales bancos, mesas y estrado
[16] El nombre de Escuela de Salamanca fue acuñado por F. Stegmüller en 1934.
[17] La Escuela de Salamanca se divulgó y se universalizó. El magisterio de Francisco Vitoria y sus lecturas académicas pronto tuvieron una divulgación y expansión en las universidades europeas, Bolonia, Roma, Paris, Dilinga o Coimbra. Desde Europa se divulga a Hispanoamérica en las universidades de México, de Lima o en Oriente en la de Manila. Los próceres independentistas se inspiraron en la doctrina de la Escuela de Salamanca.
[18] Francisco de Vitoria elabora un derecho internacional diferente, universal, humanitario y previsor sustentado en firmes principios éticos que constituirá la base del derecho internacional de los pueblos de todas las Naciones. Manifiesto de la Escuela de Salamanca, p. 16
[19] Según las palabras de Águeda Rodriguez Cruz, Salmantica docet. La proyección de la Universidad de Salamanca en Hispanoamérica, Universidad de Salamanca 1977
[20] La Universidad de Salamanca bajo Felipe II, p. 26
[21] Maestros impulsores siguiendo el humanismo cristiano de Erasmo serán Francisco Vitoria y Nebrija
[22] No se pretende divinizar al hombre, sino que este participe de lo divino penetrando en un reino de amor y libertad. La Universidad de Salamanca bajo Felipe II, p. 31
[23] Se da un verdadero intercambio de saberes asimilando los elementos semíticos, árabes y cristianos. La Universidad de Salamanca bajo Felipe II, p. 31
[24] Desde este humanismo integrado, las disciplinas académicas se estudiarán de forma escalonada para conseguir un saber integrado del dogma la moral y las costumbres, con un fuerte espíritu misionero. La Universidad de Salamanca bajo Felipe II, p. 31
[25] Así lo manifiesta Erasmo, un docto entre los doctos: Vulgus sunt, quicumque in spectu illo platónico vinctis suis affectibus inanes rerum imagines pro verissimis rebus admirantur.  Programa iconográfico de la Universidad de Salamanca, p. 31
[26] La Hypnerotomachia también se basa en una tradición humanista de escritos arcanos como una demostración del pensamiento clásico.
[27] El nombre de Poliphilio proviene del griego Polloi  "Muchos" + Philos "Amigo"
[28] En realidad, es un injerto de poema alegórico de estirpe medieval y enciclopedia humanística de vocación totalizadora, ya que contiene una ingente amalgama de conocimientos arqueológicos, epigráficos, arquitectónicos, litúrgicos, gemológicos etc.
[29] El edificio de la Universidad originalmente de planta cuadrada se fue alargando a lo largo de los siglos cambiando de fisonomía tratando de responder a las nuevas necesidades.
[30] El emblema representativo del caballero del Toisón de Oro puede verse en una cartela.
[31] Luis Cortés, ad Summum Caeli, el programa alegórico humanista de la escalera de la universidad de Salamanca. Salamanca 1967
[32] En este punto cabe destacar que los estudiantes celebran la obtención del doctorado con una capea, como colofón de su vida estudiantil.
[33] Enrique Sánchez Reyes, La lección humana de la Universidad de Salamanca, Salamanca, 1967, p. 49
[34] Cirilo Flórez Miguel, Pablo García Castillo, Roberto Albares Albares; El humanismo científico, Salamanca 1988
[35] Durante mucho tiempo se atribuyó a Pedro Berruguete pero la intervención de este se limita a una colaboración.
[36] P. Gabaudan; El Mito Imperial, p. 39
[37] Luis Cortés, un enigma salmantino, la rana universitaria, Salamanca 1971
[38] En algunas de las representaciones el amor se representa atado a un árbol con ramas frescas o ramas marchitas y rotas. P. Gabaudan; El Mito Imperial, p. 162
[39] La Amicitia es la virtud, la amistad incondicional, el amor puro y verdadero, se identifica con los sentimientos más hermosos y elevados. P. Gabaudan; El Mito Imperial, p. 159
[40] Los lados del rectángulo áureo son entre sí proporcionales a través del número de oro, phi., número irracional decimal infinito no periódico. Presente en multitud de obras de arte.
[41] La figura de Carlos aparece rodeada de seis emperadores romanos: Augusto, Marco Aurelio, Trajano, Adriano, Constantino y Justiniano. P. Gabaudan; El Mito Imperial, p. 70
[42] Que la inscripción aparezca en griego en lugar del latín habitual, denota el recuerdo del “basileus”, Constantino o Justiniano. P. Gabaudan; El Mito Imperial, p. 45
[43] En el código romano Justiniano se destaca la figura imperial y su vinculación al poder divino.
[44] La explicación de estos personajes y de sus "señas" puede encontrarse en la obra de Diógenes Laercio  en su obra Vidas, opiniones y sentencias de los filósofos más ilustres, cuyo original en griego fue por primera vez traducido a mediados del siglo XV por Fray Ambrosio Camaldolense a instancias de Cosme de Médicis, o en los adagios griegos que un siglo antes recogiera Máximo Planude o en Píndaro, epigramas que sirvieron a Erasmo para su colección de "Adagia" y a Alciato para no pocos de sus emblemas, en especial aquel de "Dicta septem sapienium".
[45] Según cuenta Demetrio de Megara
[46] Justo antes de que se inicie una codificación de símbolos a través de los libros de emblemas o de enciclopedias como la de Giovanni Piero Valenano.
[47] Los mismos jeroglífrcos que se copiaron en Salamanca se copiaron también en el desaparecido claustro de Santa Justina de Padua por los mismos años, 1524-1528, Lorenzo Lotto discurre unos jeroglíficos para la catedral de Bérgamo27, en los que explica historias del Antiguo Testamento con el mismo lenguaje con el que hemos visto se explican en Salamanca estos cuatro sabios de Grecia.
[48] No hay duda de que la figura de varón se parece mucho al Hércules Farnesio del Museo de Nápoles, sin ser exáctamente igual. Posteriormente a la edición de 1550 en los Emblemas de Alciato, se representó a Hércules descansando de sus "Doce trabajos",
[49] El mismo Erasmo nos lo describe traduciéndolo de “Luciano”, según lo explica Curión
[50] Esta es la interpretación que insinuó Camón según la opinión de Tervarerit
[51] Alciato en l53l va a dedicar dos emblemas a la Castidad, en uno la representa como Palas armada y en otro como Venus púdica, desnuda pisando una tortuga, estatua de procedencia hdiaca; en otro emblema representa la Verdad desnuda y posteriormente vuelve a representar a la Castidad o Pudor como mujer semidesnuda en la persona de Penélope.
[52] como cita Tervarent, también el estudio de Wittkower sobre las "Transformaciones de Minerva en la imaginería del renacimiento", Minerva púdica y Minerva-Venus.
[53] La iconografía de los personajes presentada en los gráficos como advirtiera Andrés Alciato al principio de su librito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario